por José Landa
Para Cosme Álvarez
1
Capitán —marinero en tierra—
contemplabas el horizonte
El abismo que hay detrás –pensabas– será mío
Nos haremos amantes y tendremos hijos
Si no fuera por mi madre y mis hermanos
Mi padre que vive allá donde se curvan los caminos
Quizá ahora despojaba ese abismo
Si no fuera
Capitán
es de entenderse
por los retratos amarillentos en el clóset
la gota del abuelo
la abuela y el óxido de su matriz
el temor de la adolescencia
que se mueve en la camisa cuando sube la marea
y sopla el viento
las voces de los muchachos —tus amigos—
que van por ti para llevarte a los burdeles
en fines de semana
y mirar el pubis de las bailarinas
como un oscuro remolino en altamar
las tardes en la plaza
las mañanas en el muelle
el tedio de ciertas noches
en el pasto del jardín de tu casa
la brisa y los pájaros
que llevan el nombre de distintas ciudades
los trozos de infancia que repartiste en varios pueblos
los baluartes
las murallas
Si no fuera
Capitán
por tus murallas
si no fuera
otra ciudad le cantara a tus ojos
2
Una madrugada soñaste Veracruz
era tan tuyo
los hombres recibían tu cargamento
(pesaba como el muro de tu recuerdo más íntimo)
Allí estaba tu gente
—la que te vio salir de la cueva de tu madre—
el molinero el pescador el sastre y la partera
la madre Juliana de cien generaciones
los unos y los otros allí estaban
Sólo brillaba la ausencia de un hombre
—imberbe aún y flaco
a quien no miraste
como no se puede mirar un espejo desde adentro—
temeroso de ver la luz de un nuevo puerto
3
Sólo el Tíber quedó tan fugitivo
por donde los muchachos huían también de sus ciudades
en otro tiempo quizá los conociste
corrías tras de fantasmas cuyos olores eran el futuro
y ellos avanzaban hasta hundirse en el agua
vestías otras ropas
hablabas otra lengua
y ahora no puedes traducir tus viejos pensamientos
olvidaste esa lengua
esas arenas
el sueño también es fugitivo y permanece
4
Al Canal de la Mancha arrojaste una piedra
deseabas escupir todos los muros de la vieja península
todos los caminos fueron tuyos
todas las construcciones
dos guardias reales te apresaron
por orinar en la cama de la reina
cuando el rey te perdonó
reíste al orar por el espíritu de todos los reyes católicos
5
Grandísimo canalla
capitán de tercera
deshazte de esas anclas
y olvida ya ese suelo que ni siquiera es tuyo
Esos retratos que amarillea la sal nacieron de otras aguas
tu madre es de otros campos
tu padre de otros ríos
en otro cielo te parió la lluvia
no en este que hoy contemplas
naciste en un camastro
has de morir en otro
Para Cosme Álvarez
1
Capitán —marinero en tierra—
contemplabas el horizonte
El abismo que hay detrás –pensabas– será mío
Nos haremos amantes y tendremos hijos
Si no fuera por mi madre y mis hermanos
Mi padre que vive allá donde se curvan los caminos
Quizá ahora despojaba ese abismo
Si no fuera
Capitán
es de entenderse
por los retratos amarillentos en el clóset
la gota del abuelo
la abuela y el óxido de su matriz
el temor de la adolescencia
que se mueve en la camisa cuando sube la marea
y sopla el viento
las voces de los muchachos —tus amigos—
que van por ti para llevarte a los burdeles
en fines de semana
y mirar el pubis de las bailarinas
como un oscuro remolino en altamar
las tardes en la plaza
las mañanas en el muelle
el tedio de ciertas noches
en el pasto del jardín de tu casa
la brisa y los pájaros
que llevan el nombre de distintas ciudades
los trozos de infancia que repartiste en varios pueblos
los baluartes
las murallas
Si no fuera
Capitán
por tus murallas
si no fuera
otra ciudad le cantara a tus ojos
2
Una madrugada soñaste Veracruz
era tan tuyo
los hombres recibían tu cargamento
(pesaba como el muro de tu recuerdo más íntimo)
Allí estaba tu gente
—la que te vio salir de la cueva de tu madre—
el molinero el pescador el sastre y la partera
la madre Juliana de cien generaciones
los unos y los otros allí estaban
Sólo brillaba la ausencia de un hombre
—imberbe aún y flaco
a quien no miraste
como no se puede mirar un espejo desde adentro—
temeroso de ver la luz de un nuevo puerto
3
Sólo el Tíber quedó tan fugitivo
por donde los muchachos huían también de sus ciudades
en otro tiempo quizá los conociste
corrías tras de fantasmas cuyos olores eran el futuro
y ellos avanzaban hasta hundirse en el agua
vestías otras ropas
hablabas otra lengua
y ahora no puedes traducir tus viejos pensamientos
olvidaste esa lengua
esas arenas
el sueño también es fugitivo y permanece
4
Al Canal de la Mancha arrojaste una piedra
deseabas escupir todos los muros de la vieja península
todos los caminos fueron tuyos
todas las construcciones
dos guardias reales te apresaron
por orinar en la cama de la reina
cuando el rey te perdonó
reíste al orar por el espíritu de todos los reyes católicos
5
Grandísimo canalla
capitán de tercera
deshazte de esas anclas
y olvida ya ese suelo que ni siquiera es tuyo
Esos retratos que amarillea la sal nacieron de otras aguas
tu madre es de otros campos
tu padre de otros ríos
en otro cielo te parió la lluvia
no en este que hoy contemplas
naciste en un camastro
has de morir en otro
[*] Del poemario: Navegar es un pájaro de pruma, en la reunión poética personal Dicho está
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